Acuartelados en algunos estados y trabajando en otros, miles de médicos que el gobierno cubano mantiene en Venezuela esperan el desenlace de la pugna entre el presidente interino Juan Guaidó y el gobernante Nicolás Maduro, hasta ahora sin planes aparentes de abandonar el país.

Por Mario Pentón y Luz Escobar | El Nuevo Herald

“Desde que Guaidó asumió como presidente, nos orientaron que debemos continuar trabajando como si no pasara nada. Tenemos miedo porque nadie garantiza nuestra seguridad y la situación se deteriora rápidamente”, dijo una profesional cubana que, como el resto de sus colegas, tiene prohibido hablar con la prensa.

Varios médicos que conversaron con el Nuevo Herald bajo anonimato dijeron que temen encontrarse en medio de un fuego cruzado si la tensión en Venezuela desemboca en una especie de guerra civil entre el régimen de Maduro y la oposición. “El ejército de Venezuela está esperando una invasión de Estados Unidos y las bandas criminales campean a sus anchas”, dijo vía telefónica un especialista en medicina general integral que se encuentra en el estado de Táchira.

“En el estado de Bolívar saquearon un CDI [Centro de Diagnóstico Integral] y se llevaron todo el equipamiento médico. En otros consultorios los médicos se han visto obligados a atender de emergencia a malandros y motorizados [paramilitares chavistas]”, dijo un tercer doctor.

En Caracas y otras ciudades los médicos recibieron la orden de permanecer “acuartelados” mientras duren las protestas en el país. Toda la misión médica cubana tiene terminantemente prohibido salir después de las 4 p.m. a la calle y han pedido que limiten su contacto con opositores.

Cuba mantiene en Venezuela un contingente de 21,700 profesionales de la salud a los que se unirían en estos días otros 2,000 que La Habana sacó de Brasil después de la victoria electoral del presidente Jair Bolsonaro, según la prensa oficial cubana. A cambio, Venezuela subsidia el petróleo que envía a la isla, que se ha reducido a unos 30,000 barriles diarios, según la agencia Reuters, aunque otras fuentes indican que La Habana recibiría unos 40,000 barriles. Además de los médicos, el gobierno de Cuba mantiene en Venezuela a miles de maestros, técnicos, asesores militares, electricistas o constructores.

La isla ingresa más de $10,000 millones anuales por el trabajo de los médicos, según cifras oficiales. Varios países han denunciado la labor de estos profesionales como “trabajo esclavo”. El Senado de Estados Unidos ha pedido al Departamento de Estado que reactive un programa especial para conceder Parole a los médicos que huyen de las misiones, mientras en España el Partido Popular (opositor) insta al gobierno socialista de Pedro Sánchez a conceder asilo político a los médicos cubanos que escapan.

Médicos cubanos reunidos el viernes 25 de enero para un curso de “reflexión y debate” en Barinas, Venezuela. Cortesía.

Médicos cubanos reunidos el viernes 25 de enero para un curso de “reflexión y debate” en Barinas, Venezuela. Cortesía.

El viernes pasado, los responsables de la misión en Venezuela pidieron a los coordinadores que realizaran “matutinos especiales” para exigir a los médicos “disciplina y firmeza” ante la coyuntura actual, según tres fuentes que pidieron el anonimato. Además, se realizaron cursos de “reflexión y debate” para hablar de la situación en el país.

“En la capital han mantenido a parte de los médicos acuartelados por temor a represalias. Hasta el momento no nos han informado de un plan para retirarnos en caso de que Maduro deje el poder”, dijo un galeno, quien además recordó que Cuba había mantenido a todo su personal en Venezuela incluso durante “el golpe contra Chávez en 2002”.

El presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, dijo el viernes que los cubanos “están bienvenidos” en el país, pero exigió que terminen su injerencia en “las fuerzas armadas y los puestos de decisión”.

En la isla los familiares y amigos de los profesionales cubanos de la salud dicen estar preocupados porque no tienen información sobre lo que ocurre en Venezuela.

“Lo único que sabemos es lo que se ve en Telesur y lo que dice la televisión cubana, que hay un intento de golpe de Estado y que los colaboradores están bien”, comentó telefónicamente desde el oriente de Cuba una la hija de un “colaborador” de la misión identificada solo como Joanna.

Los médicos en Venezuela también carecen de información sobre lo que está ocurriendo en el país porque “el internet es pésimo, sumamente lento. Lo único que tenemos permitido ver en la misión es Telesur y el noticiero de Cuba. He comprado pocas cosas, por si tenemos que salir huyendo, pero hasta ahora no nos han informado de ningún plan de contingencia”, dijo por teléfono uno de los médicos en el estado de Carabobo.