Por Rodolfo A. Rico

Los marielitos están cumpliendo cuarenta años. ¿Quiénes son los marielitos? Son esos cubanos que en entre abril y septiembre de 1980 salieron de Cuba, por el puerto de Mariel. Fueron 125 mil cubanos.  Los cumplen cuando otra revolución, esta vez en Venezuela, ha logrado que se vayan del país más de 5 millones de personas.

¿Pero cómo empezó el que hasta ahora ha sido el más importante éxodo cubano?

Con un choque de autobús el primero de abril de 1980. O mejor dicho, con un autobús robado y estrellado contra las cercas de la embajada de Perú. Seis cubanos que estaban dentro se bajaron y pidieron asilo, el custodio que protegía la embajada (también cubano) falleció al dispararse a sí mismo cuando trataba de sacar el arma, otras versiones dicen que por fuego amigo. La embajada de Perú les dió asilo y Fidel Castro solicitó que los cubanos, como si fueran de su propiedad, les fueran entregados.

Ernesto Pinto-Bazurco Rittler era entonces el encargado de negocios de la embajada peruana; y su máximo representante, porque el embajador no se encontraba. Y le dijo no a Fidel Castro, que no le iba a entregar a los solicitantes de asilo. Eso significó que la dictadura cubana le quitara la custodia a la embajada, en represalia, y anunciara que quién quisiera podría irse, esperando que unos pocos cubanos se acercaran a pedir asilo y fueran un incordio para la embajada. Lo hicieron, pero fueron más de 10 mil cubanos. Cinco por metro cuadrado.

Con más de 10 mil cubanos solicitando asilo en una embajada extranjera debieron empezar las negociaciones. Que no se les llamara asilados, ni refugiados, se decidió llamarlos “ingresantes”. El embajador que dice se montó en el auto de Fidel Castro para negociar: “Nos fuimos a dar vueltas en el malecón. Fue una conversación seria, profunda, por momentos dramática. Pero se solucionó porque hubo la garantía de que a esta gente no le iba a pasar nada”, apunta una reseña de El Nuevo Herald.

Pero el volumen de personas pidiendo asilo sorprendió al gobierno cubano que calificaba a todos los que estaban en la embajada de “elementos antisociales”. ¿Cómo es que tanta gente quería huir de la “Cuba es un paraíso para el cubano señores”?

Una manifestación que según el gobierno cubano fue de más de un millón de personas pasó enfrente de la embajada de Perú y de Venezuela (que estaba a dos cuadras y también era un país incómodo) el 19 de abril. Cinco días antes, el gobierno de Jimmy Carter, en Estados Unidos, había afirmado estar dispuesto a recibir a 3 mil 500 de los refugiados de la embajada peruana.

El 21 de abril Cuba haría el anuncio en el diario Granma: “Desde la Florida anuncian la llegada por su cuenta de algunas embarcaciones para recoger a los elementos antisociales que recibieron autorización de salida. Ya arribaron dos al puerto de Marie!.  Por supuesto que no los vamos a recibir a cañonazos porque no vienen en son de guerra y no tenemos ningún inconveniente en aceptar que se los lleven”. Fue el pistoletazo de salida, y la falta de “inconveniente” duraría hasta el 28 de septiembre de 1980, cuando Fidel Castro en un acto aniversario por la creación de los Comité de Defensa de la Revolución, daba por cerrado el éxodo del Puerto de Mariel. Según algunas informaciones, hasta 3 millones de cubanos estaban dispuestos a irse de la isla. Una sangría.

La historia de un país en fuga

Pero el éxodo de Puerto Mariel no fue el primero de la Revolución cubana que, al igual que en Venezuela, tuvo distintas etapas. Una primera entre el 59 y el 62, en la que especialmente salieron de la isla la élite que constituía grandes comerciantes, ejecutivos de grandes empresas y, al final de ese periodo, también aquellos que lucharon contra Batista, pero no querían una revolución comunista. A este grupo es al que Fidel Castro le pone el mote de gusanos.

El segundo éxodo es el del puerto cubano de Camarioca. Un éxodo compuesto por pequeña burguesía y obreros. Un éxodo también fruto del desencanto con la revolución y según investigadores más económico que político. Ocurrió en 1965 cuando cientos de embarcaciones salieron rumbo a Miami de manera desordenada, pero que dio pie a los “Vuelos de libertad” por el que salieron cientos de cubanos, diariamente, de manera mucho más ordenada. Esta etapa incluyó la formulación de la Ley de ajuste cubano, en 1966, que le dio a los cubanos privilegios migratorios.

El tercer éxodo es el de puerto Mariel y el cuarto, el ocurrido en 1995, conocido como la crisis de los balseros, pues durante meses llegaron a las costas de la Florida estadunidense luego de haber navegado precariamente a bordo de inadecuadas e improvisadas embarcaciones.

Detrás de cada crisis migratoria hay un momento de tensión, y luego de cada situación generada por la tensión, una negociación para conducir esa migración.

Venezuela: y empezó la migración llegó el comandante

En Venezuela, el chavismo ha generado al menos tres olas migratorias. La primera particularmente, luego de 2002-2003, con el golpe de Estado y el paro petrolero.

La segunda, unos autores la ubican en la primera reelección de Chávez y otros en su fallecimiento, todos coinciden en que la última ha sido particularmente fuerte, luego de 2017. La migración que se le debe a la emergencia humanitaria compleja.